Carlos – Guardabosques Nativo
Carlos tiene 28 años, es un guía natural, tiene cuatro hermanos y hermanas; uno de los cuales también trabaja en Mashpi. En casa tiene dos hijos, uno de cuatro años y otro de uno, a quienes ve cada diez días debido a su horario.
Ha sido guía en Mashpi desde hace cuatro años, y aunque su inglés no es perfecto, está mejorando gracias a las clases que proporciona el hotel.
Antes de trabajar en Mashpi, al igual que toda su familia, trabajaba en agricultura cosechando palmitos.
Hace 12 años aproximadamente, su tío que trabajaba como guardia forestal le ayudó a conseguir trabajo en la construcción del hotel. Igual que todos los demás trabajadores del proyecto en su entonces, pensó que los propietarios estaban locos. Pero cuando el hotel estuvo listo su tío intervino una vez más, convenciéndole de volver al mismo para trabajar como guía.
Antes de regresar a trabajar en Mashpi, la sostenibilidad nunca había cruzado su mente. Solía cazar armadillos con machetes.
“Ahora tenemos un conocimiento diferente, diferente de nuestros amigos en la escuela. Antes, cuando veía una serpiente, quería matarla con una roca. Ahora quiero recogerla y mostrarla a los biólogos. Trato de convencer a mi familia, pero es difícil. Teníamos que matarlos porque son animales venenosos”, dice.
“Mashpi está cambiando la forma en que la gente piensa acerca de la naturaleza, convenciéndola de protegerla”.
